TLAYACAPAN: Fue construido por agustinos entre 1554 y 1572. Lo interesante de este recinto es el museo que se encuentra en su interior, en el cual se pueden ver objetos arqueológicos y coloniales al igual que un pequeño número de momias en una sala dedicada a los cultos funebres del virreynato.
Tiene una combinación de elementos góticos y renacentistas. Su fachada muestra la verticalidad de la que ya hablé. Sus contrafuertes y muros con almenas dejan claro su función de fortaleza.
1533 y 1536 fueron los años de construcción de esta abadía de origen agustino. Aún se encuentran frailes franciscanos en su claustro que sigue en uso. En su interior enfrente de la ventana coral, se puede ver un órgano que es original. Una interesante leyenda cuenta que un campesino llegó un día con una escultura de Cristo. Los monjes se sorprendieron al querer preguntarle en cuánto la vendería pues aquel hombre había desaparecido. Concluyeron que había sido un ángel. La estatua se encuentra ahora en el Templo de San Francisco en la calle de Madero.
Atlatlahuacan:
El templo en este lugar sobresale del pueblo por su altura. Se cree que fue construido sobre una plataforma prehispánica. Su atrio está rodeado de árboles. Algo extraño en esa región.
Yecapixtla: Este lugar debe ser más conocido por su suculenta cecina más que por el convento que se encuentra ahí. Lo que llama la atención de este recinto es su rosetón gótico al frente de la fachada principal. En su interior se puede encontrar un púlpito de piedra tallado por manos harto duchas. También es importante mencionar que en su fachada se puede apreciar un estilo que es muy característico en las construcciones religiosas de esos tiempos; "el estilo tequitqui". Si alguna vez has ido a cualquier museo en México que tenga esculturas prehispánicas, te habrás dado cuenta que todas ellas son zoomorfas y antropomorfas. Los españoles aportaron la idea griega del cuerpo, pero los antiguos mexicanos no eran duchos en esculpir figuras humanas perfectas, por eso los cuerpos son toscos y las más veces desproporcionados. Ésta es la característica principal de este estilo.
Tetela viene de "tetetla" que significa "Lugar donde abundan las piedras" y fue visitado por Hernán Cortés en 1521. El magnifico estado de conservación de la techumbre, hace que su madera resalte como si fuera recien hecha. Los murales tienen un muy buen trabajo de construcción y eso es claro en los rostros. Desgraciadamente los trabajos de restauración han sido malos y eso en vez de enaltecer el lugar lo hace ver mal. Algo curioso de este lugar, es que las tropas que lo conquistaron iban al mando de una mujer de nombre "María Estrada", a quien en pago por sus labores se le da Tetela como encomienda al igual que Hueyapan.
Los murales fueron realizadas al Temple (una mezcla de mucho polvo de color muy fino conbinada con agua destilada y yema de huevo). Algunos son de clara inspiración europea, en especial por que muestran un estilo llamado "grutesco" (se le da ese nombre durante el renacimiento cuando los artistas bajaban a ciertas excavaciones que parecían grutas, para copiar las decoraciones del lugar) que combina elementos humanos, animales, vegetales y arquitéctonicos en composiciones llenas de capricho y fantasía. En la decoración mural sobrasaliente de la iglesia de San Miguel que se desarrolla desde el pie de la nave hasta el presbiterio en ambos lados de ésta, hay volutas de entre las cuales luchan guerreros indígenas con indumentaria y arma de tipo prehispánico. Los del lado septentrional toman prisioneros (hombres y hombres-planta, de inspiración grutesca) o matan a sus adversarios. En el lado meridional , los guerreros luchan al lado de hombres-animal-planta, los cuales van armados con escudo, arco y flechas.Las interpretaciones de estos murales han sido diversas durante el paso del tiempo. Una de ellas dice que es posible que estos guerreros representes luchas entre el bien y el mal y la protección divina. Aunque si se toma en claro la vasta existencia de motivos prehispánicos como águilas sobre nopales, águilas frente a jaguares, vírgulas de la palabra que representan el signo agua-incendio métafora de la guerra, la toma de prisioneros, asiéndolos de los cabellos, las banderas sostenidas por águilas y guerreros humanos, las armas y trajes de algodón, escudos, macanas y flechas, es difiícil creer que tengan un mero concepto religioso europeo.Las pinturas en los tímpanos del sotocoro y el friso bajo hacen referencia a la guerra y a su importancia en el sostenimiento del orden cósmico. Cada vez que un sacerdote celebraba el sacramento de la eucaristía elevaba un cáliz lleno de sangre de Cristo hacia el águila solar, pintada en la bóveda del presbiterio. Así, el santo sacrificio de la misa había suplido el sacrificio de los prisioneros de guerra para asegurar el renacimiento cíclico del numen solar. Y así la adoración de Zidada Hyadi también se convirtió en la de Zidada Hesu.
Ixmiquilpan es por demás un lugar de mucho interés para los amantes de los conjuntos conventuales. La riqueza iconográfica del lugar lo hace el más bello de todos. Vale la pena darse una vuelta por allá y por todos los ya mencionados. México es un país rico en muchos aspectos y creo que es importante que todos estemos concientes de ellos y nos preocupemos por la conservación y difución de nuestro patrimonio cultural.
Lista de ilustraciones: 1. Carlos I (V en Alemania) y Felipe II. Autor desconocido. Óleo sobre tabla. Principios del s. XVII. Castillo de Chapultepec. 2. Teocalli (Teo= Dios, Calli= Casa) de Templo Mayor. 3. Columnas con arcos de medio punto que rodean un huerto en un convento de la "Ruta del Volcán". 4. Interior del convento de Yecapixtla. Nótese la docoración en su bóveda de cañón corrido. 5. Portada principal de la iglesia en Tlayacapan. 6. Rosetón gótico en la iglesia en Yecapixtla. 7. Púlpito tallado en piedra, Yecapixtla. 8. El cristo es de estilo Tequitqui. Nótense sus brazos toscos y desproporcionados si se compara con el tamaño del cuerpo. 9. Iglesia en Atitalaquia Hidalgo, con muestras de estilo Tequitqui en su fachada. Nótese la proporción de las manos. 10. Cristo. Madera estofada. 11. Fachada de la Iglesia de San Miguel Arcángel, Ixmiquilpan. Contiene en su mayor parte elemntos indígenas. Del lado derecho se ve un escudo meridional con la representación de un agua-cerro, métafora para el señorío, probablemente el Cerro de la Serpiente, lugar sagrado relacionado con el nacimiento del Sol, los mitos de origen y los templos. Hay un camino sobrepuesto en él, indicado por huellas de pies humanos. Flanquean un águila y un jaguar, ambos con penachosy escudos (alusión al enfrentamiento cósmico día-noche y a la guerra). Del lado derecho se ve un escudo septentrional. Muestra un águila solar, que lleva un penacho de plumas y una bandera europea, se posa en un signo agua-cerro con verdolaga y nopal, flanqueado por dos jaguares con escudos y macanas. 12. Friso en la parte superior de los muros de la nave. Se inspira en los grutescos renacentistas que llegaron en libros impresos. En el círculo derecho, se aprecia el escudo de los agustinos, un corazón atravesado por tres flechas y un sombrero obispal. Por la combinación del conjunto de signos, se ve que el mensaje es esencialmente cristiano. 13. Mural meridional de la nave, los guerreros indígenas luchan a lado de hombres-animal-planta, los cuales van aramados con escudo, arco y flechas. 14. Friso en la parte inferior. Se ve la combinación de los signos guerreros indígenas y las formas caprichosas de los grutescos, de inspiración grecorromana. El mensaje es esencialmente indígena. 15. Pintura mural. Se ve un guerrero que sostiene la cabeza decapitada de una víctima de guerra. Grutesco hombres y hombres-planta. 16. Fachada barroca del siglo XVII de la iglesia de Atitalaquia Hidalgo del siglo XVI.